la receta de pasta casera más fácil que encontrarás
Los malfatti son un plato muy tradicional en Italia Y, pese a que su nombre significa ‘mal hecho’, es un auténtico manjar para los amantes de la pasta. Y lo mejor es que son super simples de preparar, ni tan siquiera precisas amasarlas a fin de que queden perfectas (o bien imperfectas, que es la idea). Además de esto, si eres celiaco, no puedes parar de probar este receta malfatti de ricotta y espinacas sin gluten. A los más pequeños de la casa les van a encantar estos mordiscos. ¡Prosiga leyendo y descubra!
Receta Malfatti de ricotta y espinacas sin gluten en cuatro pasos
La receta tradicional del malfatti se realiza con harina de trigo. y no es conveniente para personas con enfermedad celíaca o bien intolerancia al gluten no celíaca. Mas, con una simple modificación, podemos preparar unas pastas deliciosas y más ligeras para compartir con todos y cada uno de los convidados.
Esta vez, optamos por sustituir la harina de trigo con maicenaPero asimismo puedes emplear harina de arroz o bien almidón de mandioca, que son geniales para hacer pasta casera. Sin más ni más presentaciones, pasemos a nuestra receta de ricotta malfatti de espinacas:
Ingredientes:
Cómo hacer ricotta malfatti de espinacas sin gluten:
- Primero, limpiamos la espinaca y la ponemos al vapor o bien la blanqueamos. Ahora, picamos finamente las espinacas, asegurándonos de escurrir el exceso de líquidos de cocción.
- En un bol, pone la espinaca, el ricotta, las yemas de huevo, la maicena, el parmesano rallado, la nuez moscada y la sal al gusto. Mezclamos todos y cada uno de los ingredientes hasta conseguir una preparación espesa. y lo metemos en la nevera a lo largo de cuando menos treinta minutos.
- Pasado este tiempo, con cuchase estamos tomando pequeñas porciones de la preparación y formando bolas con las manos (más o menos del tamaño de una nuez). Una a una, pasamos las bolas por la maicena.
- Una vez hechas todas y cada una de las bolas calentamos rebosante agua en una olla grande y, cuando llegue a hervir, cocinamos nuestros malfatti hasta el momento en que surjan. Retirar del agua con una espumadera, asegurándonos de escurrirlos realmente bien.
¡Listo! Ahora puedes gozar tu malfatti de ricotta y espinacas con la salsa que más te guste. ¿Deseas un consejo? Preparar una salsa de tomate casera con unos tomates maduros cortados en concassé y salteados con aceite de oliva, ajo y unas hojas frescas de albaca. El resultado del malfatti con esta salsa encima, con un buen pan y un buen vino, puede ser una genuina exquisitez. ¡Disfrútala!
