Ensalada rápida de garbanzos y zanahoria
A pesar de ser veloz y sencillísima de preparar, esta no es solo una ensalada común de garbanzos y zanahorias, sino más bien está hecho con pasas, queso feta y un interesante aderezo de yogur, limón, miel y tahini, que puedes adquirir hecho o bien elaborado en casa con semillas de sésamo. Estos géneros de ensaladas son una forma levemente diferente de comer legumbres en casa. Hasta a los más pequeños les agradará, por su agradable textura y sus variados sabores, con un toque entretenido.
Es sobre una ensalada ideal para un almuerzo ligero y exquisito o bien una cena veloz y nutritiva. Asimismo es bajo en calorías y realmente útil para quienes desean adelgazar sin parar de comer platos apetecibles.
El aporte nutricional de garbanzos y zanahorias es riquísimo. Los garbanzos poseen vitaminas A, Y también, C y B3 y abundantes minerales., como calcio, hierro, potasio y magnesio, al tiempo que las zanahorias incluyen vitamina C y betacaroteno, con altas proporciones de potasio, calcio, magnesio, sodio, fósforo y yodo.
Ingredientes para cuatro porciones:
Para el aderezo:
- 60 mililitros de yogur heleno (puede ser bajo en grasa)
- 2 cucharadas de salsa tahini
- 2 cucharadas de agua
- 1 cucharada de jugo de limón
- ½ cucharada de miel
preparación:
- Pelar las zanahorias, quitarles el extremo y rallarlas con un rallador coreano o bien el rallador grueso. Si te agradan las zanahorias crepitantes, asimismo puedes cortarlas en palitos finísimos. Escurre los garbanzos. Envasado.
- En un tazón, Combina las zanahorias con los garbanzos, añade las pasas y el perejil finamente picado.
- Sazone con sal, pimienta y espolvoree con semillas de sésamo.
- Reserva la ensalada y prepara Siguiente el aderezo. Si lo prefiere, puede hacerlo del revés.
- Mezclar todos y cada uno de los ingredientes en el vaso de la licuadora y aguar hasta conseguir una crema. medio grueso.
- Sirve la ensalada de garbanzos y cubre con un tanto de aderezo.
Si no puede localizar pasta de tahini, puede prepararla en casa. utilizando semillas de sésamo. La receta es muy simple; Mezcle las semillas con agua y jugo de limón en la licuadora y mezcle todo hasta conseguir una pasta. Asimismo puedes añadir un tanto de ajo, a tu gusto.
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