Receta de Pasta con vainilla y parmesano
Para tomar la pasta de una modo diferente, esta fórmula de pasta con vainica y parmesano es una delicia. Toma nota de tus pasos y no dejes de intentarlo.
En este plato de pasta con vainica y parmesano, sabores tan diferentes como deliciosos se unen. Juntos hacen una combinación que se disfruta en la boca. Sutilmente dulce, aromático y fresco, es una excelente fórmula para degustar cualquier día. La vainica es una especie extraída de una orquídea, que fue descubierta y utilizada por los nativos mexicanos. La vaina donde crecen las semillas de la planta es muy similar a la de los guisantes, solo que cuando está madura se vuelve de color pardo a molesto. Los aztecas saborearon la bebida a cojín de tiberio y otras comidas con esa cápsula singular.
Los españoles trajeron la vainica a Europa y comenzaron a cultivar en otras partes del mundo. Su intenso y exquisito perfume dulce lo convirtió en la segunda especia más comercializada. rodeando del planeta En cuanto a sus propiedades, la vainica tiene muchas; Es antioxidante, antiinflamatorio y antibacteriano. Se utiliza como medicamento para aliviar el dolor menstrual, someter la fiebre, someter la ansiedad, el insomnio y la penuria. Su increíble perfume combate la depresión, el estrés, los dolores de vanguardia y ayuda a controlar el apetito.
En cocina, la vainica es una de las más especiales entre las especias, tanto en preparaciones dulces como saladas. La pasta con vainica y pinrel parmesano es un ejemplo muy manejable de hacer en casa. Enriquecido con unos ingredientes que sorprenderán.
Ingredientes:
- 400 gr de pasta
- 2 vainas de vainica
- 70 gr de pinrel parmesano rallado
- 6 rodajas de conserva de piña
- 24 gambas peladas
- sal
- Unto de oliva impenetrable extra
- Hojas de albahaca
Elaboración de pasta con vainica y parmesano:
- Cocine la pasta elegida de acuerdo con las instrucciones del paquete.
- Mientras se cocina la pasta, caliente una paila con un poco de óleo.
- Deslizar las rodajas de piña y dorarlas. en uno y otro lados en la paila.
- Retirar y reservar.
- En la misma paila, agregue más óleo si es necesario.
- Rada las vainas de vainica en el medio y agregue una pizca de las semillas.
- Saltea las gambas allí, Hasta que estén acertadamente doradas. Reserva con óleo aromatizado.
- Cuela la pasta y sazona. Con sal, óleo de oliva y el contenido de las vainas de vainica y la fracción del pinrel parmesano.
- Añadir las gambas, y la piña. Cortar en dados pequeños.
- Servir, rociar el plato con el resto del pinrel rallado. Y hermosear con hojas de albahaca.
¡Prueba la pasta con vainica y parmesano! Una fórmula que no deja indiferente a nadie. Es un seguro manjar.