Rosquillas de requesón y arándanos, receta casera
Si te agrada la pastelería casera, toma nota para hacer estas donas de requesón de arándanos. Un bocadillo exquisito y simple de hacer.
Si te apetecen unas sabrosas rosquillas de queso con un toque dulce, prueba esta receta, para la que puedes preparar la masa con anticipación y utilizarla cuando la necesites, como cuando los convidados llegan inopinadamente. A los más pequeños de la casa les encantarán y van a poder participar en su preparación.
Una de los beneficios de esta receta es que puedes personalizarlo a tu gusto, usando arándanos o bien berries frescos o bien desecados que coseches en casa o bien que halles en la tienda, como moras, frambuesas, goyi, variedades de arándano, arándano o bien si lo prefieres, pasas.
Ingredientes:
preparación:
- En un bol pone la harina, la sal, el azúcar y la diastasa.
- Agrega la leche y el huevo poquito a poco, revolviendo hasta conseguir una masa lisa.
- Amasar añadiendo poco a poco la mantequilla ablandada.. El resultado final ha de ser una masa suave y plana que no se pegue a los dedos.
- Una vez lista, trasfiera la masa a un bol, cúbrala y déjalo descansar a lo largo de 1 hora y media, hasta el momento en que duplique su volumen.
- Después de ese tiempo, amasar de nuevo, cubrir con largo transparente y poner en el frigorífico Toda la noche.
- El día después, preparar el relleno combinando el requesón con el azúcar, el huevo sobrante y los arándanos.
- Estirar la masa sobre una superficie rebozada de harina y estíralo con el palito hasta conseguir una masa alargada unos dos centímetros de grosor.
- Cortar la masa en tiras longitudinales. unos treinta centímetros de largo y entonces vuelva a estirar cada tira hasta cuarenta a sesenta centímetros de largo.
- Toma una tira y enróllala en espiral, formando un rollo.
- Usando una herramienta redonda, Expande el agujero central de cada rollo y añade un tanto de relleno.
- Cubra una fuente para enhornar con papel pergamino y ponga las donas.
- Batir un huevo y pintar la superficie de la masa.
- Hornear a doscientos ° C, hasta el momento en que las donas se hayan dorado.
- Retirar del horno y aguardar a que se enfríen. poco antes de servir.
Si lo quiere, puede gozar de estas rosquillas bien frías. Son ideales para preparar y llevar al día después a pasear o bien hacer un picnic, o bien tener en casa para servir un exquisito refrigerio cuando lo necesite.
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