Cerezas al kirsch
Las cerezas Kirsch son una preparación propia de la zona de la Selva Negra., al sudoeste de Alemania. Estas cerezas, marinadas en licor kirsch, se usan para preparar múltiples cócteles y postres, como el habitual pastel de la selva negra, postre que de forma tradicional se sirve en las datas de diciembre. Estas cerezas asimismo son ideales para acompañar helados. Lo mejor de este postre es que se puede contestar en casa de una manera sencillísima. Solo debes contar con la fruta y este licor.
La cereza es un fruto de los árboles del género Prunus, si bien realmente todos y cada uno de los cerezos son de este género, mas solo unas pocas especies se usan de manera comercial. En España la cereza se distingue de la cereza, distinguiendo la primera, Prunus avium, del segundo, Prunus cerasus. La cereza es un fruto lleno de vitaminas y minerales, cuyo probable origen está en el Mar Negro y el Caspio, con una enorme difusión siguiente cara Asia y Europa gracias primordialmente a aves migratorias y movimientos humanos. De las 2 variedades comerciales ya mentadas, hay muchas variedades, repartidas por todo el planeta.
Kirsch, por otra parte, es un licor de cereza.. Kirsch es la abreviatura de kirschwasser (literalmente, «agua de cereza» en alemán), y se realiza con una doble instilación. Kirsch usa una pluralidad de cereza negra, que genera un licor con un sabor robusto y nada dulce, la primordial diferencia entre este y el licor de cereza, que sí tiene un dulzor pronunciado.
El Kirsch se avejenta de forma tradicional en barriles de ceniza, lo que ayuda a conseguir un resultado prácticamente incoloro del licor. En el pasado se usaba la cereza, que le daba un sabor amargo, y el día de hoy se usan cerezas agridulces. En ocasiones, el kirsch se sirve como piscolabis., por sí mismo, mas en general se usa para preparar distintos cócteles y recetas de pastelería propias de Baviera.
Ingredientes:
Cómo preparar cerezas kirsch:
- Lavar buenísimas cerezas.
- Retire los extremos de los tallos y deshuesarlos.
- Póntelos en un tazón y cubrirlos con el azúcar.
- Cubrir y dejar enfriar, hasta el momento en que suelten el jugo (puede ser desde media hora, mas se puede dejar más tiempo).
- Revolver de cuando en cuando.
- En un frasco grande esterilizado, pone las cerezas y cúbrelas con el kirsch (la cantidad va a depender de la tamaño del tarro).
- Mantener en un sitio fresco y obscuro. por un mes.
Prepara tus cerezas kirsch y empléalas para hacer el renombrado pastel selva negra, idóneo para esta temporada navideña, o bien para acompañar un buen helado de vainilla. Eso sí, tenga cuidado con los pequeños, por el hecho de que el kirsch es realmente fuerte.