La tarta de albérchigo con crema de té verde matcha es un postre occidental cuidado con ingredientes asiáticos, que parecen poco lejanos y sin requisa se pueden encontrar juntos en forma de batidos y galletas o pasta. Los dos nociones principales de esta prescripción tienen su origen en China: el albérchigo, procedente del noroeste de China, y el té verde todavía fue domesticado en este país, de donde pasó a Japón, que en siglos posteriores desarrolló el proceso conocido como té matcha. .
El té molido es una técnica creada en China que pasó a Japón entre los siglos XII y XIII, pegado con el budismo zen. Esta forma de preparar té desapareció en China, pero sobrevivió en Japón en las técnicas de procesamiento y producción del té matcha. El albérchigo, por su parte, debe su nombre irrefutable, Prunus armeniacaa la larga tradición de cultivo de esta fruta en Armenia, aunque se cree que es originaria de China.
Ingredientes:
Cómo preparar esta tarta de albérchigo con crema de té verde matcha:
- En un bol cascar un huevo, añadir 25 gramos de azúcar blanca., harina y mantequilla. Amonedar todo hasta obtener una masa uniforme y eludir en el frigorífico durante dos horas.
- Para hacer la crema de té matcha, separar la clara de un huevo y colocar en un recipiente, Añade una pizca de sal y golpear hasta que esté firme. Reservar.
- en otro contenedor mezclar el té matcha con el azúcar glasnata, pinrel crema y yogur. Agrega la clara de huevo y sigue batiendo para que no baje. Almacenar en el frigorífico y sacar la masa. si han pasado dos horas.
- Precalentar el horno a 180°C. Engrasar un molde con mantequilla y arrebozar levemente con harina.
- extender la masa sobre una superficie limpia y enharinada y extiéndala con un rodillo. Colocar en el molde y hornee por 10 minutos. Retirar del horno.
- Jabonar y cortar los albaricoques. por la porción, quitarle la semilla.
- Cubrir la masa con la crema de té matcha y colocar los albaricoques encima.
- Hornear nuevamente por 40 minutos a 130°C. Dejar calmar antaño de desmoldar.
Anímate a preparar este delicioso y insólito pastel de albérchigo con crema de té verde matcha, con el que puedes unirse un servicio de té o una merienda, o para servir como postre y cerrojo valentísimo de una comida. Puedes hacer este pastel más rápido si usas masa para pastel ya preparada. Si te gustó esta prescripción no dejes de compartirla con tus amigos y contactos.