¡Exquisitos son los tacos al pastor! México es uno de los países sudamericanos con una cultura culinaria ancestral, no obstante, no es el caso de estos tacos, que prácticamente llegaron del Mediterráneo a lo largo de la década de mil novecientos treinta con la receta original del kebab a tierras mexicanas. Con el tiempo, los puestos callejeros amoldaron la receta para conseguir los tacos que conocemos el día de hoy. Esta receta que veremos ahora es sencillísima de contestar en casa.
La diferencia entre el kebab y los tacos al pastor es que se combina cerdo con carne de res, en vez de cordero. Asimismo se incluye cebolla y cilantro, esto como una parte de los mexicanos para darle su toque propio y crear su identidad.
Ingredientes:
preparación:
- Cortar una cebolla en pedazos grandes.
- Abre los chiles chipotles y quita las semillas.vierte en una cacerola así como las condimentas, la cebolla picada y los dientes de ajo pelados.
- Hervir a fuego medio alto para ablandar a lo largo de unos veinte minutos.
- Cortar la carne de res y la de cerdo en cubos del mismo tamaño. Y reserva.
- En una licuadora vierte la mezcla de chile más el jugo de piña. Desmenuzar y batir hasta conseguir una consistencia homogénea.
- Picar finamente el resto de las cebollas.. Entonces entremezclar con la carne picada de res y cerdo.
- Bañar con vinagre, sal y salsa picante. Llevarlo a descansar a la heladera por 2 horas.
- Pasó el tiempo, transfiera la carne a una sartén o bien cacerola grande, echamos un chorrito de aceite y cuando esté humeando, comenzamos a sofreír las proteínas. Dar un punto de sal.
- Cortar la piña en tiras y sofreír así como la carne y el cerdo. Remueve para integrar todo. Sazone al gusto para corregir los sabores.
- Deja que se cocinen a lo largo de unos diez-quince minutos. Revuelva continuamente.
Puedes acompañar esta receta con una salsa verde. Precisarás chiles serranos verdes, tres tomates, ajo, cebollín, sal, pimienta y un jalapeño. Corta todos y cada uno de los ingredientes y cocina a la parrilla (si no tienes, hazlo en una sartén antiadherente sin aceite) Cuando estén sutilmente torrados, licúa, condimenta con sal y pimienta y listo. Esta salsa es propia de México y contrasta con perfección con el dulzor de la piña en la carne. Rellena tus tortillas al gusto, decora con cilantro que va a ayudar a elevar todavía más la experiencia.
