Sopa de calabacín con salvia y tomate

Una sopa de calabacín con salvia y tomate es reconfortante y muy nutritiva. La salvia es conocida por sus usos medicinales y gastronómicos, ya que es una hierba aromática que aporta un sabor incomparable a las comidas. Se puede usar fresca y sequía, y en combinación con otras hierbas. En las cocinas francesa e italiana es muy popular.

Sus propiedades terapéuticas han hecho que desde la decrepitud se haya utilizado para problemas digestivos y como antiinflamatorio, y entre sus beneficios se encuentran sus múltiples antioxidantes. Asimismo, es aséptico y antiviral, antiespasmódico, estimula el matriz, es tónico y febrífugo, antifúngico y estrogénico. Asimismo reduce los niveles de carbohidrato en crimen.disminuye los sudores nocturnos, estimula la secreción de inquina y es bueno para controlar los desórdenes hormonales.

Cuando se combina con tomates, sus cualidades antienvejecimiento se ven reforzadas por el licopeno de tomate. Con salvia se puede aromar óleo de oliva o mantequillay dar un toque gastrónomo a cualquier plato.

En cuanto al calabacín, su suspensión contenido en agua lo convierte en un partidario para los regímenes de control de peso, pero incluso para dietas equilibradas y saludables. Es rico en vitaminas C y B, y en minerales como potasio y fósforo, y pequeñas cantidades de magnesio. Contiene muy pocos carbohidratos y calorías. Esta sopa de calabacín con salvia y tomate es una verdadera dije culinaria. Muy tratable de preparar, y apto para toda la grupo. Lo mejor de todo es que es muy tratable de replicar en casa, con ingredientes económicos y fáciles de encontrar.

Ingredientes:

  • 1 calabacín ínclito
  • 1 tomate
  • 16 hojas de salvia
  • 1 cebolla pequeña
  • 1 cucharada de mantequilla
  • Óleo de oliva inmaculado extra
  • Sal y pimienta negra recién molida
  • Cómo preparar una sopa de calabacín con salvia y tomate:

    1. Picar en brunoise calabacín, cebolla y tomate.
    2. En una cazuela, añadir un chorrito de óleo de oliva y freír las verduras con 10 hojas de salvia.
    3. Rehogar a fuego medio un par de minutos.
    4. Cubrir con agua y dejar cocinar por 15 minutos. Sazone al sensibilidad.
    5. Licúa todo hasta obtener una crema. (puedes probar la textura no agregando todo el deducido de una vez, pero agregándolo al sensibilidad).
    6. Rectifica el punto de sal al sensibilidad, incluso puedes añadir un punto de pimienta molida.
    7. Próximo, En una paila poner la cucharada de mantequilla y cuando se derrita, poner las hojas de salvia restantes. Freír hasta que estén crujientes.

    Sirve la sopa de calabacín con salvia y tomate y decora con las hojas de salvia. Es un entrante exquisito, o una cena muy ligera, para cuidar la vitalidad. Puedes acompañarlo con picatostes o tallos de apio muy picados, para darle incluso otro toque crujiente.

    Salir de la versión móvil