Si te agrada tomar cerveza, has de saber que puedes prepararla en casa. ¿Te agradaría procurarlo? Acá te dejamos el pasito a pasito. ¡Vamos a hacerlo!
La cerveza es una de las bebidas más consumidas del planeta. Ha sido un compañero ideal para cualquier ocasión desde por lo menos el siglo XV. La fermentación alcohólica de cereales sostenida por diastasas es una práctica con historia. En la antigüedad se le proporcionó, como el día de hoy, un alto valor social, mas asimismo nutricional. Se puede gozar en una asamblea con amigos o bien como acompañante de comidas. Tomado con moderación, puede ofrecer beneficios para la salud. Si sabemos hacer cerveza en casa, podemos gozarla cuando queramos, siempre y en toda circunstancia con la prudencia precisa. A la receta estándar, que acá presentamos, se le pueden agregar diferentes toques de sabor, para amoldarse a cada persona.
Tradicionalmente la cerveza ha sido una bebida para gozar en celebraciones o bien cuando deseamos refrescarnos. Lo que no siempre y en toda circunstancia recordamos es que es un ingrediente realmente útil en la cocina. Incluso en ciertos países es normal hallarlo en diferentes y exquisitas preparaciones a las que destaca su sabor. De ahí que no extraña gozarlo en diferentes salsas y distintos guisos que hacen las exquisiteces de cualquier paladar.
La cerveza asimismo es ideal para ablandar y marinar carnes, a las que agregan sabor y textura y pueden aportar cremosidad a la pasta y al arroz. La diastasa de cerveza es muy usada en la preparación de postres como tartas, helados e inclusive exquisitas tartas.
Nutrientes de la cerveza
La cerveza contiene muchos nutrientes. Es rico en minerales como fósforo, potasio, silicio; el sodio está presente en pequeñas cantidades. Asimismo ofrece primordialmente vitaminas B, como riboflavina, niacina y piridoxina. Tiene propiedades antioxidantes que mejoran la salud del corazón y asisten a retrasar el envejecimiento.
Por otro lado, esta exquisita bebida aporta ácido fólico y proteínas de alto valor biológico. Merced a su contenido en silicio, ayuda a prevenir la pérdida ósea y favorece la densidad ósea. Asimismo este mineral está asociado a la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. Su consumo moderado favorece la contestación inmunitaria en frente de infecciones.
Ingredientes:
Cómo hacer cerveza en casa:
- Para la preparación necesitaremos un termómetro de cocina. En una olla echamos el agua y después la malta de cebada. La temperatura requerida es entre sesenta y siete y sesenta y nueve grados. Es esencial no dejar de remover poquito a poco, a fuego lento, a lo largo de más o menos noventa minutos.
- A mitad de este tiempo agregamos los lúpulos.. Batimos para eludir que se nos pegue.
- Cuando está ya listo pasamos el mosto, como asimismo se conoce al líquido extraído del proceso precedente, a otro recipiente.
- Ponemos esta mezcla en el congelador a fin de que la temperatura reduzca.
- Para cuando esté absolutamente frío podemos incluir levadura. La función de este es convertir el azúcar del mosto en alcohol.
- La mezcla se trasfiere esmeradamente a un recipiente con agua que está absolutamente vacío. Reservamos en un sitio obscuro a dieciocho grados a lo largo de diez días. Aún no está ya listo pues le falta gas.
- Pasados 10 días cambiamos el recipiente de agua por otro y lo guardamos a lo largo de una semana más en exactamente el mismo sitio.
- Pasado este tiempo hacemos una mezcla afín a un almíbar, que es lo que nos dejará conseguir el gas.
- Para conseguirlo ponemos el azúcar en una olla con un tanto de agua y dejar calentar unos minutos o bien hasta el momento en que hierva. Entonces incluimos el mosto que estaba guardado y mezclamos todo suavemente.
- Dejamos descansar esta mezcla unos treinta minutos y después la metemos en las botellas de vidrio. Los guardamos otros diez días en un sitio obscuro con una temperatura entre quince y dieciocho grados.
- Durante este tiempo la cerveza formará gas debido a la carbonatación natural.
- Después del proceso de carbonatación ahora si la cerveza está ya lista y podemos consumirla.
- El azúcar del almíbar es esencial a fin de que el final sea espumoso. No obstante, asimismo se puede substituir por miel o bien jarabe de maíz.
Esta receta de de qué forma hacer cerveza en casa es exageradamente simple. Pese a requerir múltiples días para preparar esta bebida, el proceso no es nada complicado. Si prosigues los pasos al pie de la letra, vas a poder compartir una exquisita cerveza fría con quien desees o bien en la calma de tu hogar.
Con esta exquisita receta de de qué forma hacer cerveza en casa vamos a asombrar a nuestros convidados. Lo mejor es que puedes eludir salir a adquirir y puedes consumirlo cuando desees. Si te agradó la receta, asegúrate de probarla, seguro que te encantará. Recuerda que es una bebida de la que no se puede abusar, con lo que disfrútala con responsabilidad.