Entre los postres más tradicionales y simples de hacer de la cocina turca se halla la tulumba. Seguro que tienes los ingredientes en casa, ¡manos a la obra!
Tulumba es uno de los postres turcos más simbólicos que existen. Detrás de ella hay una historia y un sabor que han trascendido los límites del tiempo y las barreras de las innovaciones en la cocina de ese país. Por esta razón, es interesante descubrir de qué manera se prepara y otra información relevante sobre este fantástico postre. La tulumba o bien bamiyeh es común en cualquiera de los pueblos de lo que es conocido como el viejo Imperio Otomano. Su dinastía duró unos seiscientos años y en su tránsito incluyó países que ahora conocemos como Israel, Líbano, Jordania, Hungría, Grecia, Egipto, Bulgaria, Siria, Rumania, Macedonia y la costa norteafricana. En otras palabras, este postre turco aún se puede hallar en estos territorios el día de hoy. En dependencia de la zona, recibe diferentes nombres. Tulumba es un plato que se come frío y en general se sirve en datas esenciales para judíos turcos, israelíes y persas. Se consume en Hanukkah, por poner un ejemplo, el festival hebreo de las luces.
Este exquisito postre, la tulumba, Está compuesto por una masa frita, cubierta por una crema de limón. La mezcla de masa contiene almidón y sémola, que es lo que le da el toque restallante. Su contenido nutricional complementa, en buena medida, la dieta. Tiene las propiedades del limón, que contiene vitamina C y vitamina liposoluble de tipo A, poderosos antioxidantes naturales que resguardan al organismo de la acción negativa de los radicales libres y previenen diferentes enfermedades. Tulumba asimismo contiene las grasas poliinsaturadas de la mantequilla, los hidratos de carbono de la harina (que, por su parte, tiene algo de proteína); y sémola, que aporta potasio y calcio. El potasio es un mineral que ayuda al buen funcionamiento de los músculos. El calcio, por su lado, interviene en el desarrollo y conservación de huesos y dientes.
Ingredientes
Para el almíbar:
Ingredientes para la masa:
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharadas de azúcar
- 2 tazas de agua
- 2 ½ harina
- 4 huevos (a temperatura entorno)
- 3 cucharadas de sémola
- 2 cucharadas de maicena
- 2 tazas de aceite vegetal (o bien un tanto más si es preciso)
- Nueces molidas (opcional)
Cómo preparar tulumba:
- Ponga todos y cada uno de los ingredientes medidos a mano para facilitar la preparación.
- Prepara el almíbar en una cacerola.. Entremezclar el agua con el azúcar y encender el fuego a fin de que hierva la mezcla.
- Revuelve todo hasta el momento en que el azúcar se integre bien en el líquido.
- Baja la llama y deja que la mezcla se reduzca a lo largo de unos quince minutos. Agrega asimismo el jugo de limón y deja al fuego dos minutos más.. Entonces apaga el fuego y deja que se enfríe.
- por Prepara la masa, toma una cacerola y primero añade el agua, la mantequilla y el azúcar. Enciende el fuego y mezcla todo hasta el momento en que se integren los ingredientes.
- Es esencial que el fuego sea bajo mientras que se prepara la mezcla, pues en caso contrario se va a secar en demasía. Se trata de que todos y cada uno de los ingredientes se integren en su punto ideal de textura.
- Toma la harina y añade con una cuchase de madera hasta el momento en que la masa esté homogénea y suelta. Cuando empieza a ponerse demasiado pegajoso para la cuchase, quiere decir que es hora de apagar el fuego.
- Toma los huevos y añade uno a uno en la masa sin dejar de remover con la cuchase de madera.
- Agrega la sémola y la maicena con cuidado (moviendo siempre y en todo momento con la cuchase en la mezcla).
- Busque una manga pastelera con punta de estrella (Si no tienes uno, hay opciones alternativas en internet para hacerlo casero) y mete la masa dentro.
- Calentar de manera profunda una sartén y agregar el aceite.. Enciende el fuego y espera a que esté muy caliente, mas sin abrasar.
- Una vez que el aceite esté caliente, aprieta la manga sobre la sartén en líneas pequeñas. Y usar una cuchase o bien aparejo para freír y desplazar las piezas. La idea es que se doren uniformemente.
- Cuando la tulumba esté lista, la retiramos del fuego y la ponemos a escurrir sobre una toalla de papel absorbente para escurrir el exceso de grasa.
- Untar encima el almíbar de limón y dejar descansar unos minutos..
- Al terminar, para servir, tomar los platos y poner los dulces almibarados decorados con nueces molidas. Vierta un tanto más de almíbar y listo.
Este es uno de los postres de pavo más restallantes y exquisitos. Además de esto, es muy dulce por el almíbar que se le agrega. Ahora no debes pasear por las calles de ese país, pues puedes hacerlo sencillamente en casa. Asimismo se puede estimar como uno de los postres preferidos de los pequeños turcos, con lo que si tienes comensales pequeños, esta receta te va a venir realmente bien. Corre a prepararlos y goza del máximo sabor de uno de los postres más ovacionados de Turquía.