Los comestibles integrales están poco a poco más presentes en la rutina diaria, pues dan el equilibrio para una buena dieta. Desde la avena, el trigo, la quinua, el maíz, el arroz, hasta el centeno, son comestibles con una alta carga de nutrientes, mas que si se someten a procesos de refinado pierden sus propiedades nutricionales. No obstante, el hecho de que una receta contenga un ingrediente integral no quiere decir que sea exactamente saludable, puesto que asimismo hay que tener en consideración la composición con el resto de ingredientes.
Para todo esto, para identificar un comestible como un todo, debe preservar prácticamente todos los componentes naturales tras moler. Como resultado se consigue un producto más obscuro, menos fino y con más textura al tacto, como es el caso del salvado de trigo.
Sus beneficios son extensos, comenzando por que aportan muchas menos calorías y azúcar, que contribuye a la prevención de enfermedades, como la diabetes y el sobrepeso. La cantidad de recetas que se pueden preparar con cualquiera de los cereales integrales es amplísima, como por ejemplo: pan, galletas, pasteles, spaghettis, hamburguesas, tortitas o una perfecta torta integral de anís, que es el postre que te vamos a enseñar para hacer punto por punto esta vez.
Ingredientes:
preparación:
- Precalentar el horno a 180°.
- En un bol, rompe los huevos. Use una batidora para batirlos hasta el momento en que estén espumosos. Vas a saber que está ya listo cuando puedas dibujarlo soltando un hilo de la mezcla.
- Agrega la miel, vuelve a batir.
- Vierta el licor de anís, el aceite vegetal, el jugo de limón, la ralladura, la vainilla, la leche (tibia) y la sal. Vuelve a batir hasta añadir todo.
- Luego, use un colador para tamizar la harina de trigo integral, la harina de trigo y el polvo de enhornar. Con unas varillas o una espátula, mezcla con movimientos envolventes hasta lograr una consistencia homogénea.
- Engrasa y enharina un molde para enhornar. Vierta la mezcla en ella y hornee a lo largo de treinta a treinta y cinco minutos.
Para saber que la torta integral de anís está ya lista, solo hay que introducir un cuchillo. Si no queda ningún resto cuando lo quitas, entonces puedes sacarlo del horno. Desmoldar aún caliente. Para decorar, puedes espolvorear azúcar glas por encima y listo. .
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