los palitos de calabacín con queso parmesano Se transformarán en un temtempié de lo más recurrente. Tiene una base de ingredientes saludables y vegetales que los hacen en especial ventajosos para toda la familia. El calabacín es un vegetal saciante que tiene una serie de propiedades ideales para sostener la línea y también incorporarse a nuestro menú semanal. Merced al parmesano podemos crear un bateador perfecto. Para eludir más grasas no las freiremos, las cocinaremos en el horno para conseguir ese sabor restallante y frágil que va a hacer las exquisiteces de los más exigentes. Si deseas cocinar el calabacín de una forma diferente, toma nota de estos palitos, son exquisitos.
Ingredientes:
- 1 calabacín
- 3 cucharadas de queso parmesano rallado
- 1 cucharada de pan rallado
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de perejil seco
- 1 cucharada de sal
Cómo preparar palitos de calabacín con parmesano:
- Para preparar estos palos, empecemos encendiendo el horno. Esta herramienta nos dejará cocinar este piscolabis con menos grasa, precalentar a 200º A fin de que vaya tomando temperatura.
- Seguimos con el calabacín., lo vamos a lavar para poder cortarlo con la piel incluida. Lo cortamos en palitos de más o menos exactamente el mismo tamaño para cocinarlos al tiempo.
- Vamos a preparar el batido.En un plato ponemos el queso parmesano, las migas de pan, el ajo en polvo y el perejil seco. Mezclaremos estos ingredientes a fin de que formen una sola masa. Podemos poner más parmesano que migas de pan si nos agrada su sabor o bien acrecentar la cantidad de ajo, las cantidades son indicativas.
- Ponemos los palos sobre la mezcla. A fin de que queden bien empapados con todos y cada uno de los sabores. Podemos utilizar una técnica consistente en poner la masa en una bolsa para congelar que sea consistente y de tamaño mediano. Ponga el calabacín y agite hasta el momento en que esté de manera perfecta cubierto con la mezcla.
- Como tenemos los palitos maltratados. Los ponemos en la bandeja del horno.. Lo vamos a haber cubierto con un tanto de papel vegetal a fin de que no se peguen. Cada palo va a estar con la piel cara abajo a fin de que estén lo más restallantes posible.
- Los vamos a poner en el horno a 180º a lo largo de unos treinta minutos. En dependencia del tamaño pueden ser precedentes. Observaremos los palos hasta el momento en que estén dorados por fuera y por la parte interior estén blandos.
- Vamos a servir caliente, están considerablemente más satisfechos con el queso derretido. Los vamos a acompañar con una salsa de tomate y un tanto de mahonesa, van a ser un entrante ideal.