Receta de natillas de piña

Si te gusta experimentar cosas nuevas en tu repostería, estas natillas de piña son ideales. Toma nota de tus pasos y pruébalos.

La crema de piña es el postre perfecto si quieres disfrutar tanto de niños como de adultos.. La cremosidad de las natillas, combinada con el sabor entre la piña agridulce, es un refrigerio dulce ideal. Esta receta es ideal para un día caluroso, ya que es fresca y con un delicioso toque tropical. Natillas surgió hace mucho tiempo, dentro de los conventos. Con pocos ingredientes y una preparación simple, los monjes idearon un postre que se convirtió en la estrella indiscutible de la pastelería europea. Otra versión localiza el origen del postre en Francia durante la época del Renacimiento. En ese momento solo los nobles tenían acceso para disfrutarlo. En la actualidad se puede degustar una exquisita crema casera del sabor que dicta la imaginación del chef.

Este plato es tan versátil que tiene una amplia gama de sabores. Es el caso de estas natillas de piña, refrescantes y suaves. sin volverse empalagoso. La receta tiene pulpa de piña que contiene nutrientes importantes para la salud. Se le atribuyen propiedades digestivas, diuréticas y antioxidantes; También es una fuente de manganeso y vitamina C, necesaria para fortalecer el sistema inmunológico. Esta fruta está compuesta principalmente de agua, por lo que es ideal para incorporar en un plan de pérdida de peso.

Ingredientes:

  • 4 huevos
  • 100 ml de jugo de piña
  • 5 rodajas de piña fresca
  • 30 gr de maicena
  • 500 ml de leche
  • 150 gr de azúcar
  • Cómo preparar crema pastelera de piña:

    1. Disuelva el almidón con unas cucharadas de leche.
    2. Batir los huevos y agregar el almidón disuelto.
    3. Además, triture las rodajas de piña, la leche, el azúcar y el jugo en la licuadora o licuadora.
    4. Pase la preparación a través de un colador para extraer toda la fruta restante.
    5. Coloque la preparación en una olla y lleve a fuego suave. Antes de que se rompa el hervor, retirar del fuego y agregar los huevos con el almidón. Mezclar bien y volver al fuego.
    6. Con una cuchara de madera, revuelva hasta que la crema empiece a burbujear.
    7. Coloque la crema de piña en tazas o tazones individuales. Dejar calentar durante 10 minutos a temperatura ambiente. Finalmente, cubra con una envoltura de plástico y reserve en el refrigerador hasta la hora de servir.
    8. Presente cada taza decorada con un trozo de piña fresca.

    Con un poco de crema de piña, su familia estará encantada. Tienen todo lo que un postre casero debe tener: textura cremosa, sabor increíble y simplicidad.

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