Si te agradan los platos de carne originales, un tanto diferentes, no dejes de probar estas mollejas crepitantes. Anote el punto por punto.
La receta de mollejas crepitantes de simple preparación nos deja hacer un buen empleo de las carnes que consumimos. Siendo un corte que es parte de las vísceras, este elemento acostumbra a ser considerablemente más económico en cualquier una parte del planeta. Cualquiera puede preparar esta proteína con un presupuesto bastante bajo. Alén de esto, es un ingrediente muy energético y tiene un cierto aporte nutricional singular que no se puede perder de vista. La molleja es parte del sistema digestible de múltiples animales, con lo que se puede situar en diferentes zonas conforme la especie. Es una carne bastante fibrosa, robusta y sana siempre y cuando esté bien limpia y cocida. No se precisa ningún tratamiento singular para su preparación y en verdad se puede preparar a través de cualquier técnica culinaria que implique la cocción.
Probablemente, la molleja mejor valorada de la gastronomía mundial es la de ternera. Este es uno de los que mejor sabor tiene, si bien no es el único que se utiliza en la cocina. A lo largo del siglo XVIII, este componente se usó como estimulante bastante poderoso. Conforme ciertos registros, esta propuesta ocupó un sitio singular en la casa real francesa a lo largo del reinado de Luis XV.
La técnica de cocción
Las mollejas se pueden guisar, asar, freír y asimismo enhornar.. Lo más estricto de su preparación debe ver con su limpieza anterior, en dependencia del animal. En el caso de la carne de ave, por norma general se examinan interiormente para advertir pequeñas piedras. Con esto, sencillamente se revuelven y se sigue la cocción. En numerosos países de Latinoamérica es tradición emplear esta una parte de las vísceras. Eso sí, su sabor va a depender del género de ingredientes que se usen para adobarlo y acompañarlo.
Países como Uruguay, Argentina, Colombia y Venezuela integran las mollejas a su dieta frecuente, asimismo por su bajo costo de mercado. En países como España asimismo se consumen con determinada recurrencia e inclusive se sirven en restaurantes. A lo largo de un buen tiempo la receta de mollejas crepitantes y otras de su tipo se presentó al público con su nombre francés. ris de veau. Seguramente esto se deba a ciertos cortes comerciales. No obstante, con el tiempo el nombre «molleja» se ha salvado y normalizado, teniendo asimismo una cierta connotación histórica positiva.
Los beneficios nutricionales
La carne de molleja es tan nutritiva como cualquier otro corte de carne.. Eso sí, su composición va a depender del género de animal que escoja el chef. Ciertos van a ser un tanto más grasosos que otros, si bien todos tienen un alto contenido de grasa. Este corte acostumbra a ser rico en vitamina liposoluble de tipo A y cinc debido a su función en el organismo del animal. Se piensa que su consumo eventual contribuye al buen funcionamiento de órganos como el hígado. Solo las personas diagnosticadas con enfermedad cardiaca severa deben eludir comer este género de propuesta debido al alto contenido de grasa de este producto animal. Alén de esto, las mollejas son una genial fuente de vitaminas y minerales variados. Ahora, vas a ver lo simple que es cocinarlos en una presentación restallante y frita que a cualquiera le va a gustar … ¡Prosigue leyendo!
Ingredientes:
Cómo hacer una receta simple de molleja crujiente:
- Lavar y picar el puerro, el pimiento morrón y las judías verdes en juliana fina.
- Agrega el puerro, el pimiento morrón y las judías verdes en un bol..
- Pelar y rallar las patatas y poner sobre la mezcla de verduras en el bol.
- Vierta un tanto de aceite de oliva en el cuenco de verduras y sazone. Entremezclar bien.
- Calentar una sartén con aceite de oliva y rehogar las verduras mixtas hasta el momento en que todo esté dorado..
- Calentar el horno a baja temperatura y poner allá las verduras fritas a fin de que no se enfríen.
- Picar las mollejas en cubos y sazonar.
- Cepille las mollejas con un tanto de aceite de oliva..
- Mezclar el pan rallado con un tanto de perejil y cubrir las mollejas con esta mezcla.
- Freír las mollejas a fuego medio hasta el momento en que estén tenuemente doradas.. Dale un punto de sal.
- Sirve las mollejas con la mezcla de verduras.
Esta receta es afín a la milanesa empanizada, con la diferencia de que no se le añade huevo. Esto es de esta manera pues la molleja tiende a tener una mayor cantidad de grasa y acostumbra a ser un tanto pegajosa. Esta característica le deja sostener las migas de pan adjuntas … ¡Sorprendente!
La receta de la molleja restallante es sencillísima y no precisa muchos ingredientes. Indudablemente es una genial forma de comer con placer sin gastar mucho dinero … ¿Te agradaría probar este fácil plato? Seguro que lo vas a repetir muy frecuentemente. ¡Cocinemos!