¿Conocías esta receta de masa que se combina con todos los rellenos? Toma nota de sus pasos y asegúrate de probarlo, te sorprenderá.
Contar con una receta fácil y rápida de masa para tarta, que se puede llenar con lo que queremos y que siempre es tierno y sabroso, es una excelente opción. Además, esta masa tiene pocos ingredientes y el procedimiento puede recordarse muy fácilmente. Otra de sus ventajas es que se puede preparar tanto con harina blanca como con harina integral, en diferentes proporciones.
Este es el masa de pastel que puede usar para hacer diferentes versiones de postres, Tarta gallega, jamón y queso, queso y cebolla, carne, pollo, verduras, entre otros. Hay infinitas opciones para hacer rellenos, y todos van bien con esta masa salada.
Ingredientes:
preparación:
- Ponga la harina en un tazón, agregue la sal y el polvo de hornear. Remover hasta integrar los tres ingredientes.
- Calienta la leche en una cacerola. Cuando esté un poco tibio, retírelo del fuego.. Antes de incorporarlo a los otros ingredientes, verifique su temperatura y que esté en su punto ideal.
- En un recipiente separado, batir un huevo, agregar la misma cantidad de aceite y la misma cantidad de leche tibia. Remover.
- En el tazón de harina, haga un agujero en el medio y vierta gradualmente la mezcla, mientras revuelve, hasta que se forme la masa. Si falta líquido, agregue un poco de leche tibia.
- Dale forma a la masa y reserva hasta que tengas listo el relleno del pastel.
- Una vez que el relleno esté listo, Corta la masa en dos partes (una ligeramente más grande que la otra) y extiéndelas con el rodillo.
- Engrase una bandeja para hornear, coloque uno de los discos de masa debajo, Extienda el relleno en la parte superior y luego cúbralo con la masa restante.
- Cierre los bordes, pinche la masa para que no se infle y píntela con huevo batido.
Esta masa fácil no toma más de 15 minutos y el resultado es excelente, especialmente si no descuidamos la temperatura de la leche. El truco para que la masa agria siempre sea perfecta es que la leche no está ni demasiado fría ni demasiado caliente, sino a una temperatura media.
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