Si te agrada preparar exquisitas ensaladas en casa, opta por esta ensalada de quinoa y verduras asadas. Acá te dejamos el punto por punto.
Hacer una ensalada de quinoa y verduras asadas es para hacer un plato lleno de cosas fantásticas para el cuerpo. Mas no solo eso, asimismo sabe realmente bien. Su nombre científico es Chenopodium quinoa, pertenece a la familia del amaranto, y designa una semilla llena de aminoácidos esenciales y proteínas de calidad afín a la leche. Es originaria de los Andes y su nombre procede de la voz quechua kinwa o bien kinuwa.
El cultivo de la quinoa se atribuye a los viejos incas, singularmente en la cordillera de los Andes. Por su alta resistencia y tolerancia, el día de hoy se cultiva no solo en Perú, Ecuador y Bolivia, sino más bien asimismo en Colombia, Argentina y USA, y en otros países de Asia y Europa con geniales rendimientos. Si bien es una semilla, se considera un pseudocereal puesto que estos los granos son impresionantemente nutritivos y superan sobradamente a los cereales tradicionales como trigo, avena, arroz o bien maíz. Por tal razón, frecuentemente se clasifica como un superalimento.
La quinoa tiene un sabor delicado, que recuerda algo al cous cous o bien al arroz, y cuando se cocina sus granos quedan sueltos, refulgentes, lo que le da a la ensalada de quinoa y verduras asadas un aspecto colorido y tentador que invita a darle un bocado a la boca. Estos frijoles son restallantes y aportan textura a cualquier preparación que los incluya.
Durante milenios fue el comestible básico de las etnias andinas, así como la papa y el maíz. Estos viejos habitantes la llamaron Chisaya mama (“La madre de todos y cada uno de los granos”) por la cantidad de nutrientes que aportaba al organismo, y si bien a la llegada de los conquistadores padeció severos reveses (asolaron campos agrícolas y se prohibió su siembra, cosecha y consumo bajo pena de severos castigos), la quinoa consiguió quedarse.
Algunos historiadores apuntan que quizá el origen del rechazo de la quinoa fue la connotación sagrada que tenía para los incas, y que hubo que suprimirla de forma simbólica para someterlos. Merced a estudios modernos de mediados del siglo veinte, singularmente por estudiosos norteamericanos, se conocen sus virtudes nutricionales. Incluso la NASA estaba interesada en que creciese en el espacio.
Ingredientes:
Cómo hacer la ensalada de verduras asadas y quinoa:
- Precalienta el horno a doscientos ° C.
- Pelar la remolacha, adecentar el pimiento (eliminar las semillas y las venas blancas).
- Cortar la calabaza, la zanahoria y la remolacha en cuadrados medianos, más o menos del tamaño de un mordisco.
- Cortar el pimiento y la cebolla juliana.
- Lave bien las espinacas y separar las hojas de los tallos. Si no te agrada demasiado el sabor de las espinacas, puedes reemplazarlas por otras verduras afines, como las acelgas.
- Coloca todas y cada una de las verduras en una bandeja para horno., Sazone al gusto.
- Bañar las verduras con un buen chorrito de aceite de oliva, mezclando bien.
- Hornee a lo largo de veinte minutos más o menos a ciento ochenta ° C. A mitad de la cocción, voltee las verduras. para que se doren por igual.
- Comprueba que todo esté bien introduciendo un mondadientes. Si todavía faltan, déjelos por cinco minutos. más en el horno.
- Mientras tanto, cocine la quinoa conforme con las instrucciones del paquete. Una vez cocido, escúrrelo bien para eliminar toda el agua y reservarla por unos momentos.
- Aparte, preparar el aderezo: en un frasco con tapa hermética, mezcla sal, pimienta, una cucharadita de vinagre balsámico y cuatro o bien cinco cucharadas de aceite de oliva. Agite para emulsionar.
- Coloca las verduras en un bol grande, añade la quinua y condimenta con el aderezo.
- Mezcle bien todos y cada uno de los ingredientes de la ensalada integrar los sabores.
- Adorne con piñones y hojas de albaca.
Prepara esta ensalada de quinoa y verduras asadas y vas a tener una explosión de sabores y nutrientes. Ten presente que puedes añadir cualquier verdura a tu gusto, como berenjenas, calabacín, hinojo, tomates, espárragos, aceitunas verdes o bien negras, etc. Asimismo puedes cambiar la salsa vinagreta por miel y mostaza, lo que le daría un toque muy singular a esta ensalada. toque interesante (una cucharada de mostaza vieja, una de miel, ½ de vinagre y 3 de aceite de oliva). La imaginación es el límite.
Además, conforme se asan, las verduras sostienen sus propiedades nutricionales y adquieren un sabor considerablemente más agradable que cuando se hierven o bien guisan. Es una exquisita ensalada que puedes comer fresca, caliente o bien tibia e inclusive fría. Es ideal para llevar de picnic o bien gozar de una cena, que va a ser ligera y saciante. Esta ensalada de quinoa y vegetales asados es atractiva, exquisita y súper saludable, y merece la pena hacerla por lo menos una vez por mes.