El panecillos Son tradicionales de la gastronomía americana.. Si bien diríase que su origen se remonta al año mil setecientos sesenta y fueron preparados por vez primera en Austria. En numerosos países se les conoce como “bollos chinos” si bien estos no se fríen. Desde principios del siglo XVIII empezaron a servirse en los restaurants de los grandes hoteles neoyorkinos debido a su utilidad. Por sus peculiaridades, esta clase de pan es muy usado en banquetes corporativos rellenos de distintos ingredientes. Se pueden consumir en el desayuno, la cena o como merienda a media mañana. En América Latina se sirven para acompañar la “ensalada de gallina”, un plato tradicional de la cena navideña.
Dividir la masa en dieciseis porciones para supervisar mejor la cocción de la panecillos. El tiempo de cocción cambia entre veinte y veinticinco minutos, en dependencia del horno usado. Es precisamente por esto que se aconseja pincharlos en el centro con un mondadientes para asegurar que estén absolutamente cocidos.
Estos panes se pueden comer en la cena con lonchas de embutido.. Si bien son energizantes y aseguran un enorme aporte calorífico. Son ricas en vitamina B12, cuya ingesta favorece el desarrollo de las funciones cerebrales. Lo idóneo es consumirlos en el desayuno… ¡Lee la próxima receta!
Ingredientes:
Cómo preparar panecillos:
- Pon la levadura y el agua tibia en un bol. Disolver y dejar descansar a lo largo de diez minutos. Se trata de que los principios activos de la diastasa empiecen a hacer efecto.
- Calentar la leche y agregar la mantequilla así como dos huevos batidos y el azúcar..
- Vierte la harina poquito a poco sobre la diastasa y revuelve.
- Combine las mezclas de leche y harina. Batir para hacer la masa hasta el momento en que se despegue de los lados del bol.
- Amasar hasta conseguir una mezcla suave y flexible que no se pegue a los dedos.. Aparte de hacerlo a mano, asimismo puedes emplear una máquina amasadora para esto.
- Haz un pan y déjalo descansar noventa minutos en un recipiente tapado.
- Extraer el aire de la masa y dividir en dieciseis porciones.
- Haga bollos redondos con cada porción de masa y colóquelos en un molde para enhornar cuadrangular..
- Pincelar los bollos con huevo batido y enhornar a lo largo de veinte minutos a doscientos grados centígrados.
- Retirar del horno y comer recién horneado, pero primero dejándolas enfriar un tanto.
- Atender
Estos mordiscos se pueden complementar con una bebida caliente a lo largo del invierno. Se sirven como guarnición en la cena o como merienda al final de la tarde. Si te sobró algo de la noche precedente, cómelos rellenos de jamón y queso en el desayuno… ¡A cocinar!