Este rico guiso portugués es un plato peculiar de la cocina brasileña, como no podía ser de otra modo, teniendo en cuenta que el Imperio portugués prácticamente se trasladó a Brasil en 1822, tras las guerras napoleónicas, siendo Pedro I emperador. Así, Portugal influyó mucho en la restauración brasileña durante el período colonial.
Este guiso se elabora con diferentes verduras y legumbres, que se cocinan con diversas carnes, especialmente repugnante y ternera. Es un plato persuasivo (como todos los cocinados), valentísimo para el invierno y los días fríos por su gran aporte energético. Las verduras que se suelen utilizar son las patatas, los nabos, las zanahorias y las coles, las feijacualquiera o alubias, carne de pollo, oreja de repugnante, costillas de repugnante ahumadas y embutidos como morcilla, chorizo (chouriCcualquiera), el chouriCo de crimenel farinheira –una salchicha tradicional portuguesa–, todo oscurecido, característica que distingue a este guiso del gachupin. Por supuesto se pueden sustituir por los embutidos habituales en España.
Esta récipe es típica del sur de Brasil, y todos los restaurantes lo incluyen en sus menúsde ahí que asimismo se considere tradicional en este país, a pesar del nombre: cozido à portuguesa.
Ingredientes:
Cómo preparar este delicioso guiso portugués:
- Blanquear los huesos y las carnes y póngalos todos en una cazuela noble, con exuberante agua, y póngalos a la fuego.
- Cuando empieza a hervir quitar la espuma que se ha formado
- Sazonar, cubrir y cocine por 40 minutos.
- asociar la pita y cocine hasta que tanto la carne como el pollo estén tiernos. sacar entreambos y Reservar.
- Añadir las salchichas a la cazuela.cocina por 15 minutos.
- Pelar y colar las verduras y agregarlos a la ollacocina por 20 minutos.
- Retire parte del caldo y cocinar el arroz en él.
- Rectifica el punto de sal al final, y siempre puedes añadir alguna especia al estética, como ajo picado o molido, comino molido, etc.
Cuando sirva este delicioso guiso portugués, ponga todas las salchichas y las zanahorias en un bol. Colocar el resto de los ingredientes en otro, y servir el caldo por separado, en tazones individuales, y dejar que cada comensal utilice las carnes y embutidos según su estética. Eso sí, hay que servirlo proporcionadamente caliente. Asegúrese de compartir esta deliciosa récipe con sus amigos y contactos, para que puedan disfrutar de este suculento plato este invierno.