El plato de Santa Pau fesols con chorizo. Una receta completa, sana y idónea para preparar en casa, lo que nos enseña que no se precisa demasiado para preparar un manjar. La delicadez de las judías es la protagonista. Esta leguminosa es muy popular en Gerona, España.
los los frijoles son legumbres con miles y miles de años de historia que pudo tener su origen en la Edad del Bronce peruana, aun ya antes, tal vez remontándose al comienzo de la historia desde el instante en que se comenzó a amaestrar su empleo.
De tu lado, La butifarra es un embutido fresco común en España que acostumbra a distinguirse por el hecho de que se prepara solamente con carne magra de cerdo, o sea, no contiene grasa animal. Se añaden sal, pimienta y otras condimentas para adobar.
Ambos comestibles tienen un esencial aporte nutricional que, en el caso de los frijoles, como la mayor parte de las legumbres, son ricas en hierro, ácido fólico y vitamina B6. Al tiempo que el chorizo es un comestible que aporta proteínas al plato. Mientras, el magnesio, el potasio y las proteínas de alta calidad de las setas completan el valor de los fesol de Santa Pau con chorizo que todo el planeta precisa conocer.
Hay múltiples formas de prepararse este plato de complejidad media. Esta vez, añadiremos hongos para una mejor experiencia gastronómica.
Ingredientes:
preparación:
- Remoja los fesols de Santa Pau de la noche anterior.
- Al día después, cuela los frijoles.
- Ponlos en un cazo y vierte suficiente agua con un punto de sal, hasta el momento en que los cubra (más o menos una hora y media)
- Agrega la hoja de lauro y el puerro troceado. Asimismo puedes agregar una cabeza de ajo cortada por la mitad, medio tomate, media cebolla grande y una zanahoria.
- Cuando los frijoles estén tiernos corregimos la sal y la pimienta negra.
- En una sartén, vierta un chorrito de aceite de oliva y añada las salchichas peladas.
- Apriete suavemente con un tenedor hasta el momento en que se desmorone.
- Cuando esté dorado, agregar los champiñones picados (preferentemente rebozuelos). Dale un punto de sal.
- Saltee hasta el momento en que esté listo. Añade los fesol de Santa Pau, mezcla un tanto y retira del fuego.
Puedes servir el plato con poco o bien nada de caldo, como prefieras. Decora con el perejil picado y listo vamos a tener una comida fantástica y idónea para cualquier día.
Cuando haya probado los frijoles, no deseará regresar a comer sin ellos jamás más. Te invitamos a que los pongas siempre y en toda circunstancia en remojo anticipadamente y que el tiempo de cocción sea suficientemente largo para lograr esa textura grasosa y lisa.
