El Prescripción de crema catalana al microondas Puede cambiarte la vida, es el secreto de las abuelas reinventado en minutos, claro y delicioso, puedes conseguir un 10 en segundos. La ingenuidad de un buen postre es que siempre que sea casero es mucho más saludable. Puedes conseguir un dulce delicioso con la cantidad de azúcar controlada, es asegurar, con una serie de ingredientes que seguro tienes en casa, a tu modo. Esta y todas las recetas que tengas en mente las podrás adaptar en casa cómodamente.
El microondas nos ha hecho la vida más claro y lo ha hecho con el tiempo que nos ahorra. No solo cocinando los alimentos rápidamente, sino incluso gracias a una combinación de ingredientes que puede concluir siendo la que marque un ayer y un luego. Ha llegado el momento de principiar a preparar las descanso o una revés al trabajo en la que nos apetecerá un cambio importante. Son días en los que necesitamos poner sobre la mesa algunas recetas tradicionales que cobran un papel esencial. Toma nota de cómo se hace la récipe de las abuelas en este siglo XXI con una crema catalana hecha en menos tiempo.
El secreto de la abuela reinventado en minutos, claro y delicioso
La crema catalana es un postre tradicional que lleva siglos presente en la cocina de esta comunidad autónoma. Bajo la influencia de los expertos franceses que hicieron de esta crema la precursora de poco más, se ha convertido, sin duda, en un referente que ha completo siendo un gran partidario de nuestras mesas festivas.
Tradicionalmente se cocinaba en todos los hogares, siendo uno de los primeros referentes gastronómicos de este dulce que ha completo siendo el que podemos preparar fácilmente en casa, en un desobstruir y cerrar de luceros. Las nuevas tecnologías hacen que la cocción de estos manjares suponga un ayer y un luego.
Una sensación extra de bienestar que acaba siendo el mejor partidario de la comida rápida y casera. Si siempre sales a pedir una buena crema catalana de postre, podrás cocinarla en tu propio microondas lo más rápido posible gracias a esta récipe que esconde el secreto de las abuelas. En tan solo 8 minutos la tendrás letanía para disfrutar.
Prescripción de crema catalana al microondas: ingredientes
Cómo preparar una crema catalana en el microondas
Este postre es tan sencillo que parecerá inalcanzable no conocerlo ayer. En esencia, una crema catalana es como una crema pastelera, pero destaca por el azúcar mosqueado que podemos preparar con las herramientas adecuadas.
- De la fracción de la crema que necesitemos colocamos un vaso y el resto lo ponemos en un bol apto para microondas.
- En el bol que tenemos preparado para el microondas, añadimos la piel de un limonada o medio limonada, si es muy egregio, y la rama de canela.
- Introducimos la crema en el microondas a máxima potencia durante 4 minutos. Es importante que el bol tenga tapa o que no esté saciado para evitar que se derrame la crema.
- Por otro banda, ponemos la maicena en el vaso de crema que hemos apartado para poder diluirla por completo y evitar grumos.
- Seguimos batiendo en un bol las yemas con el azúcar. Podemos utilizar unas varillas eléctricas para conseguir una crema más homogénea.
- A la mezcla de las yemas y el azúcar le añadimos la crema que tenemos con la maicena. Obtendremos la almohadilla de esta increíble crema.
- A continuación, retira la crema del microondas. Retira la cáscara de limonada y la rama de canela y añádelas a la mezcla.
- Mezclamos poco a poco la crema caliente con el resto de ingredientes. Conseguiremos una crema catalana casi perfecta.
- Volvemos a meterlo en el microondas. Lo ponemos a máxima potencia en serie de 2. Pasado este tiempo removemos la nata.
- Repetimos la operación durante 2 minutos más, en total tardaremos 4 minutos en tener la crema letanía.
- Las distribuimos en vasitos individuales, las tapamos con film y al servir quemamos el azúcar por encima.
Una vez hecho, solo queda probarlo y disfrutarlo. Lo mejor es cocinarlo con prelación. Puedes hacerlo por la mañana, ayer de ir a la playa, y disfrutarlo por la tarde, cuando vuelvas a casa. Es un postre que tiene ese contraste de azúcar mosqueado por encima. Un pequeño placer que podemos permitirnos de vez en cuando.