Crema de melón y almendras: ¡receta fría!

El crema de melon y almendras Es una explosión de sabor capaz de conquistar hasta los paladares más exigentes. El origen de este plato no está muy claro, si bien puesto que el gazpacho es una receta habitual andaluza, hay quien especula con que asimismo puede proceder de esa zona. Lo cierto es que te sorprenderá lo simple que es de preparar y asimismo lo rica que queda. Una alternativa fácil, nutritiva y exquisita con la que vas a poder asombrar a tus convidados en una próxima asamblea.

Lo mejor de esta receta es que combina un exquisito sabor con excelentes propiedades nutricionales. Por una parte, tenemos el melón, una fruta rica en vitaminas A, C y minerales. Tienen un alto contenido en agua y pocas calorías. Es una fruta con efecto diurético, con lo que es idónea para sostener y perder peso. Además de esto, su consumo asimismo es muy aconsejable para el sistema inquieto, robustece el sistema inmunológico y previene el envejecimiento.

Las almendras, el otro ingrediente clave de esta preparación, asimismo son un excelente fuente de vitamina E, conocido por su efecto antioxidante y por tener un nivel alto de proteínas. Aporta grasas saludables, calcio y otros minerales. Asimismo aporta energía por el hecho de que tiene un índice glucémico bajo, con lo que es tolerado por los diabéticos.

Ingredientes:

  • 1 melón mediano
  • 80 gr de almendras molidas
  • 125ml de leche
  • 1 cucharadita de sal marina
  • 1 diente de ajo grande
  • 3 cucharaditas de almendras picadas
  • 1 cucharadita de sal gruesa o bien marina
  • pimienta negra recién molida al gusto
  • Cómo preparar la crema de melón y almendras:

    1. Lo primero que debes hacer Retire la piel del melón y retire todas y cada una de las semillas.. Corta el melón, lo más pequeño que puedas para facilitar el triturado del mismo.
    2. En un tazón para entremezclar, añadir los pedazos de melón, la almendra molida, la leche, los ajos grandes pelados y picados finamente, una cucharadita de sal gordita y pimienta negra recién molida. Licúa todo realmente bien hasta conseguir una consistencia mantecosa.
    3. Comprobar el punto de sal y corregir si es preciso. Si deseas que la nata quede menos compacta, agrega un tanto más de leche. Puedes emplear leche de vaca o bien leche de almendras.
    4. Poner la nata en un bol y llevar a la heladera por múltiples horas ya antes de servir. Es esencial que la nata esté friísima.
    5. Cuando vayas a servir la nata, puedes decorar con unos pedacitos de almendra picada.

    Fácil, veloz y delicioso, de esta forma es esta receta que claramente no puedes parar de probar. Lo mejor es que aparte de deliciosa es muy saludable, ¿a qué esperas para prepararla?

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