Las cremas son idóneas para cualquier temporada del año, incluyendo el verano. Te dejan cambiar los ingredientes y prepararlos con cierta antelación. Se puede hacer una buena cantidad y guardar en un recipiente en porciones. Son nutritivas y exquisitas y siempre y en toda circunstancia son la opción alternativa ideal si los pequeños de la casa ponen muchas disculpas en el momento de comer verduras. La crema de alfalfa con verduras es, exactamente, un buen ejemplo. Con ella se consigue un plato bien interesante en sabor, aparte de un buen número de nutrientes para nuestro organismo.
Y si además de esto enriquecemos las preparaciones con ingredientes frescos y diferentes, siempre y en toda circunstancia va a ser una buena sorpresa cuando se lleve a la mesa esta rica crema de verduras y alfalfa, por el hecho de que en dependencia de las verduras que se empleen, hasta los colores variarán: calabaza , patata, zanahoria, coliflor… hasta donde alcanza la imaginación. Y es que además de los incontables beneficios de incluir verduras en la dieta, asimismo la alfalfa aporta mucho desde el punto de vista saludable, puesto que es una planta muy nutritiva de la que se pueden consumir tantas de sus hojas y semillas como brotes o bien brotes. La receta presentada se puede hacer con los germinados.
Ingredientes:
Cómo preparar una crema de alfalfa con verduras:
- En una cacerola con el agua y la sal poner las verduras picadas hasta el momento en que estén tiernas, menos cebolla, perejil y cilantro.
- triturar totalmente solo las verduras, agregando un tanto de agua de cocinar reserva lo que queda del agua de cocción.
- en la sartén vacía poner la mantequilla y rehogar la cebolla picado en brunoise así como el perejil, asimismo picado finísimo.
- Cuando la cebolla es pochada agregar el puré de verduras y entremezclar, sazonar.
- Agregar alfalfa y cilantro picado, y corregir la textura agregando más agua de cocción, si es muy grueso.
- Servir de manera inmediata.
Puedes acompañar esta exquisita crema de alfalfa con verduras con picatostes crepitantes, elaborados con cuadraditos de pan (preferentemente torrados, si bien los puedes hacer fritos, con un chorrito de aceite de oliva). Asimismo se puede picar cebollino y perejil y espolvorear en el momento de servir en los platos.
La nata la podéis hacer con caldo de pollo o bien de carne, lo que más os guste, si bien a nuestro enteder es mejor hacerla con agua y dejar que tome el sabor de las verduras. Asimismo puedes preasar las verduras en el horno, hacer puré y proseguir exactamente los mismos pasos con la cebolla. Seguro que el sabor te sorprenderá.