Si charlan de café con leche, de forma inmediata piensas en café. Mas no siempre y en toda circunstancia es de esta forma. Existen incontables formas de prepararlo y una de ellas es la Latte Murasaki-imo, una mezcla de leche, nata y polvo de camote morado, sirve como opción para quienes no acostumbran a tomar café. Este producto se puede localizar de manera regular en los mercados asiáticos. En verdad, el polvo Murasaki-imo se produce en el país nipón. Para preparar esta receta, es esencial que halles esta pasta en un mercado especializado. El resto de la preparación es sencillísima y no ofrece ninguna complicación.
Sin embargo, el auténtico origen del boniato morado se halla en América del Sur. Con la llegada de España al territorio de Sudamérica, empezaron las exportaciones a otros continentes, como Asia, donde el país nipón se transformó en uno de los primordiales usuarios hasta crear sus cultivos y recetas.
Este tubérculo es un comestible atractivo merced a su color, un interesante tono púrpura debido a la incidencia de las antocianinas, las responsables de la pigmentación. Lo mismo que hacen los carotenoides en las zanahorias y las batatas anaranjadas. El sabor varietal del boniato recuerda un tanto al de las castañas, si bien prosigue siendo bastante afín al del resto de sus especies.
Para comerlas solo hay que hervirlas, preferentemente con la piel., de este modo vamos a estar aprovechando al límite sus nutrientes y sabor. Asados, cocidos, en puré, en cremas, mas jamás imaginaste que se podía preparar en un café con leche. En esta ocasión te presentamos la receta y el punto por punto para hacer un exquisito Murasaki-imo latte, una receta con raíces niponas.
Ingredientes:
preparación:
- Tamiza el polvo de Murasaki-imo en una taza. Ahora, vierta cincuenta mililitros de agua caliente más una cucharada de azúcar granulada. Remueve con una cuchase hasta el momento en que se incorpore todo.
- Luego mezcle 1/2 cucharadita de camote morado en polvo con otra 1/2 cucharadita de azúcar. Vierta sobre la crema compacta y añada tres gotas de colorante para comestibles (o bien hasta el momento en que tenga un color morado intenso). Use una mini batidora o bien licuadora para conseguir la textura compacta.
- Sirva unos cubitos de hielo en un vaso, vierta la leche entera.
- A continuación, agrega la primera mezcla de Murasaki-imo (la que no tiene colorante)
- Cubrir con la crema que preparamos previamente.
- Si deseas, puedes espolvorear más Murasaki-imo encima y prosperar todavía más la presentación.
Este Murasaki-imo latte sin café es ideal. Es súper fácil de preparar y lo mejor es que lo puedes tomar a cualquier hora del día. ¡Déjanos tus comentarios y cuéntanos tus creencias!